miércoles, 29 de junio de 2016

Debemos despertar

Nos imponen una partidocracia estéril. Elecciones democráticas en las cuales debemos optar entre partidos serviles al mismo dueño, al Dinero. Ese Dinero alabado en sus escrituras, ese Interés glorificado por sobre todas las cosas y camuflado de amor al prójimo y de hacer a bien sin saber a quién.

Debemos despertar, si no será demasiado tarde. Somos la única raza que está desapareciendo, nos están extinguiendo. 

Ya hoy día gran cantidad de blancos son mestizos. Por suerte todavía tenemos la fuerza de voluntad y la creatividad.


Debemos restituir nuestra cultura de señores, para esto debemos ignorar completamente el dinero y el Interés que son las armas semitas. 

Hay que llevar a cabo la revolución contra el dinero, oponerse a éste, oponerse a quienes obtiene sus cargos gracias a éste, oponerse a la falsa democracia que hoy día nos gobierna, y de la cual argumentan que es la mejor forma de gobierno. No! No para nosotros. 

No necesitamos que el dinero y el interés nos impongan presidentes y legisladores; no necesitamos organizaciones como la ONU nos dominen. 


No los necesitamos antes, y tampoco debemos necesitarlo ahora. Nuestro domino fue sin especulación financiera, sin tasas de interés; y el planeta que habitamos sigue siendo el mismo, la tierra y las piedras de donde extrajimos nuestro arte, de donde forjamos nuestra civilización son las mismas.

Al igual que los semitas reclaman sus tierras, su espacio “vital” basados en las escrituras atribuidas a pastores de  cabras analfabetos, nosotros reclamamos nuestras tierras europeas basados en aquello ordenado por la naturaleza y en nuestro poder para obtenerlas.

Aquellos que no comprendan este mundo desde la óptica Racial, como sí lo hace el pueblo Semita, están condenados a vagar desorientados entre doctrinas políticas imperfectas y religiones ajenas a su naturaleza; y así, negando la realidad natural y racial que los rigen, servirán de esclavos a quienes sí respetan la herencia de sangre.