martes, 11 de abril de 2017

Dialéctica Patria-Raza.

Necesita ser aclarada la posición del nacionalismo en relación a la dialéctica Patria/Raza. La Patria es la unidad histórica y política de la raza. La raza es la base humana y el sujeto creador de la Patria. 

De ese modo la raza permanece con frecuencia inconsciente y el hombre percibe su actuación en comunidad a lo largo del tiempo exclusivamente como Patria.


El Estado concebirá las relaciones inter-raciales e internacionales, en lo posible, dentro de una voluntad de cooperación entre los pueblos. Esa cooperación sólo será posible con quienes no amenacen la libertad, la integridad y la identidad de nuestro pueblo.

El nacionalismo desecha toda idea de dominio, exterminio o explotación más allá de la legítima defensa. Nuestra concepción racial nos insta al mutuo respeto y a la colaboración contra el imperialismo y por el progreso de la Humanidad.

Nosotros no luchamos hoy por una posición de poderío mundial; luchamos simplemente por la existencia de nuestra Patria, por la unidad de nuestra nación y por el pan cotidiano para nuestros hijos.

En cuanto a la misión que forma el núcleo del destino histórico que es la Patria, baste decir que ha de ser la misma que la del Estado, su instrumento político, o sea: preservar la raza para que ésta pueda producir los más elevados valores. 

Ésta fue la concepción que también tuvo Onésimo Redondo, para el cual el sentido histórico de España había consistido en preservar la arianidad de nuestra porción sudeuropea frente a los ataques del semitismo y la africanidad.

La definición de Patria de José Antonio Primo de Rivera, Patria como unidad de destino histórico en lo universal, es esencialmente correcta. La mera existencia de la raza no supone la de la patria sino sólo su posibilidad; es precisa la existencia además de una organización política y un destino histórico común y propio. Esto es evidente.