domingo, 30 de octubre de 2016

Piensa Nietzsche......

El moralista desprecia todos los valores del yo, siendo el altruismo la norma suprema de conducta. El altruismo es entregarse a los demás sin esperar nada a cambio. El altruismo no es más que una justificación de decadencia personal.

Lo fuerte es algo suprahumano y en cambio lo débil y lo vulgar es propio del hombre.

La verdad es aquella clase de error sin la que una determinada especie de seres vivos no podrían vivir. El valor para la vida es lo que decide en última instancia.

Hay que ser conscientes del valor relativo que tienen los conceptos.

La negación de los ideales implica la negación del principio de individualización.

- Moral de los señores : la de las individualidades poderosas que tienen superior vitalidad y vigor para consigo mismas. Es la moral de la exigencia y de la afirmación de los impulsos vitales.
- Moral de los esclavos : la de los débiles y miserables, la de los degenerados ; regida por la falta de confianza en la vida, porque valoran la compasión, la humildad y la paciencia. Es una moral del resentido, que se opone a todo lo superior y que por eso afirma todos los igualitarismos.
 
Piensa Nietzsche que el hombre es un ser miserable e inmundo, un ser a medio hacer, Es su destino, pero en su recorrido evolutivo poco ha sido todavía lo alcanzado: <<Habéis evolucionado del gusano al hombre, pero todavía hay mucho de gusano en vosotros>>.El hombre es como una enfermedad en el universo, y es el único animal que todavía no ha llegado a consolidarse. La vida humana conlleva un grave riesgo: o vencer al hombre mediante la superación, o volver a la animalidad primitiva. Mientras todos los animales han producido algo superior a ellos, el hombre se resiste a evolucionar, no quiere abandonar lo valores del pasado y dar un nuevo sentido a la humanidad.