Donde no hay héroes
Donde nuestros himnos están prohibidos
Triste día de mayo aquel
Vi llorar a un niño en la calle
Sucumbido por el miedo
Triste día de mayo aquel
Vi a su madre morir junto a él
Sucumbida por el odio
Por aquellos que ayer como hoy
No escuchan el clamor
De los muertos y su dolor
Triste día de mayo el de hoy
Que todos brindan y celebran
La muerte como un nacimiento
Triste día de mayo el de hoy
Que vestidos de gala
Ensalzan el sufrimiento
Escupen y vomitan odio
Sobre los recuerdos
De aquellos que hoy no merecen su respeto.